Corregir

Mi profe, Marcelo Kogan, no había tenido tiempo de mirar mi tesis porque estaba enrollado escribiendo un FONDECYT nuevo para pedir. Pero ayer se supo que hubo una prórroga en el plazo para pedir los famosos FONDECYT, principalmente por culpa de los niñitos regalones que se han tomado las universidades y no han dejado entrar a los edificios a sus profesores, quienes no han podido hacer su pega. Esa es una tontera que cuando yo tenía ramos no podía entender, ¿cómo diablos los profes pueden pescar tan poco la docencia? Pero si no se hace trabajo de investigación, no se publica, y si no se publica, el profe pierde puntos para su carrera profesional, lo que puede hasta significar el despido del profesor. Se trata de ser productivo publicando, la docencia es totalmente secundaria. De hecho, en USA, Canadá y Europa muchas veces se la dejan al perraje, i. e. los estudiantes graduados. Me salí del tema. Sólo agregaré que si los pelotudos que aún tienen tomadas las universidades quieren parar, bien, pero que no le impidan trabajar en las cosas que de verdad les importan a sus profesores.

Vuelvo a lo que iba a decir. Ahora Kogan tuvo tiempo para ver mi tesis. Pero el profe Melo de la USACH, pidió sesión de discusión de resultados, la que resultó en una recorrección de lo que escribí en la versión β1 de la tesis. A trabajar como loco el fin de semana, antes de que Kogan se entusiasme de nuevo con su FONDECYT. Vamos por el β2.

¡Tadá!